Tienes a continuación, los siguientes artículos:

 

- Expresión pirenaica

- Pureza de raza y defectos incompatibles

- Recomendaciones de compra.

 

En breve, tendremos disponibles para su lectura, más artículos. Entre ellos:

 

- Responsabilidades del criador 

- Cuidados del Montaña de Pirineo


EXPRESIÓN PIRENAICA:

 

Existe una principal característica propia, típica, única y exclusiva del Perro de Montaña de los Pirineos.

Se trata de la llamada “expresión pirenaica”.

En efecto, no es fácil de definir ni de describir; pero sin embargo, se reconoce solo con verla.

Jueces y criadores destacados de la raza han abordado este tema en distintas ocasiones y desde distintas perspectivas. Podríamos citar, entre otros, a Guido Massimello, Alain Pecoult, Benoit Cockenpot (autor de un libro de referencia sobre la raza de Perro de Montaña de los Pirineos), o José Luis Ucher… No podemos por menos que agradecer enormemente sus aportaciones y alabar sus conocimientos y experiencia.

Todos ellos están de acuerdo en que esa maravillosa y peculiar “expresión pirenaica” solo se consigue con una cabeza típica, sin defectos. Porque aunque la mirada sea fundamental, no pueden fallar ni faltar otros detalles:

Los ojos, más bien pequeños, nunca deben ser redondos, sino oblicuos. El iris debe ser pardo ambarino.

Las orejas, pequeñas,  no pueden estar insertadas más alto que la línea de los ojos. Triangulares y redondeadas en el extremo.

La pigmentación de trufa, belfos (que no deben ser caídos) y alrededor de los ojos,  debe ser negra, sin fallos.

El stop, suave, en leve inclinación.

Todos los detalles citados, y otros, dan como resultado una cabeza de líneas armónicas, en la que destaca una mirada tremendamente inteligente y expresiva, dulce, soñadora, incluso nostálgica, afectiva, cargada de un encanto indescriptible, inconfundible, y sobre todo, irrepetible en ninguna otra raza de perro.

 

Estamos hablando, sin duda, de la “expresión pirenaica”. Una elegante e inteligente expresión de cariño y bondad. Algo así no puede ser solo morfología. Posiblemente, también provenga de la fuerza de su corazón.

En la imagen contemplamos a un soberbio ejemplar, Obélix (Ciro) de Torreiro do mar, junto a una buena amiga. Preciosa foto, cortesía de Javier Muñiz.

 


PUREZA DE RAZA Y DEFECTOS INCOMPATIBLES

 

Debemos tener claro, que la pureza de raza se demuestra cuando un perro se asemeja a su estándar, cuando su figura y temperamento se acercan indiscutiblemente al mismo, y carece de defectos, o si acaso, hay alguno leve, que puede ser ignorado en un momento dado.

 

Por el contrario, la presencia de defectos, nos hace pensar en que, aun cuando el perro pueda pertenecer a una raza, y tenga su inscripción en RRC (que realmente nada garantiza), o incluso en LOE, puede tener algunas  impurezas más o menos directas o indirectas, cercanas o lejanas en su genealogía, y que pueden delatar que no se trata de un auténtico perro de pura raza. Y en todo caso, la suma de sus defectos y alejamiento del estándar, lo convierten en un ejemplar que no es bueno para criar, y no debe ser utilizado para ello, pues lo único que se conseguiría sería perpetuar o acrecentar esos defectos, en contra de los cuales hay muy buenos y serios criadores luchando desde hace muchas décadas. Una sola persona irresponsable, puede echar por tierra tantos años de selección. Desgraciadamente, en nuestra raza, hay algunas...

 

Tratándose del Perro de Montaña de los Pirineos, los defectos más destacables que pueden delatar esas impurezas, serían los siguientes:

 

- Mala pigmentación en trufa, alrededor de ojos, y belfos. Concretamente, una trufa rosada es grave e inaceptable. El color de toda la pigmentación citada debe ser negro, sin faltas. Incluso debe ser negro también el paladar.

 

- Los ojos redondos, son delatores. Deben ser más bien pequeños y oblicuos.

 

- Belfos caídos. Deben ser poco colgantes, cubriendo la mandíbula inferior.

 

- Orejas implantadas más altas de la línea de los ojos. Y las cuales deben ser pequeñas, triangulares y redondeadas en el extremo. Este defecto, junto con el de los ojos redondos, y belfos caídos, serían graves y muy delatadores. La cabeza se convertiría claramente en atípica, anulando la maravillosa y necesaria "expresión pirenaica", máximo exponente de la pureza y belleza de la raza (ver artículo anterior).

 

- El stop, debe ser suave. Un stop nulo o demasiado abrupto, son también defectos, no muy graves, pero que intervienen directamente en la tipicidad de la cabeza.

 

- El pelo, deber ser largo y suelto, sobre todo alrededor del cuello y en la cola. El pelo corto o ensortijado es un defecto. También lo es, e importante, que si hubiera pelos negros, éstos lo fueran hasta su raíz.

 

- Presencia de doble espolón en patas posteriores. De hecho, la ausencia de los mismos, es motivo de descalificación en una exposición.

 

- La línea dorsal debe ser recta, y no dar aspecto de lomo "ensillado".

 

Todos estos detalles son de gran importancia, y constituyen una buena guía. Para más datos e información a este respecto, recomiendo leer el artículo de Benoit Cockenpot, de afijo Pic de Viscos, al que agradezco enormemente su aportación en este sentido y en la cría del Montaña en general.

 

Vemos en la foto la ejemplar pureza de rasgos de Ada de Torreiro do Mar; gentileza de Helder M. Gracias.

 


RECOMENDACIONES DE COMPRA:

 

1.- Piensa primero que hay muchos perros esperando para ser adoptados. Quizá el tuyo pueda ser uno de ellos.

 

2.- Piensa también, en tu situación familiar, laboral, en el espacio de tu vivienda, en tu nivel económico, etc. Si las labores familiares, laborales, son favorables. Hay sitio en casa, o incluso en el exterior de la casa. Si los ingresos económicos permiten alimentar un perro como se merece...

 

3.- Habiendo sopesado las circunstancias de los puntos 1 y 2, tienes claro que lo que quieres es un perro de pura raza, y en este caso, un Perro de Montaña de los Pirineos, empieza por contactar con un criador especializado, responsable, serio y reconocido. Lo sabrás porque te dará todo tipo de información, incluso por escrito. Además, en este momento actual de internet, tendrás muy completa información al respecto. Basta con tener la paciencia de buscar un poco.

 

4.- Ojo con los que se llamen "criadores", pero te pongan pegas a la hora de ver a los padres, o a la hora de enseñarte el pedigrí de los mismos, o no tengan afijo reconocido legalmente con su correspondiente número. Solo la inscripción en LOE de ambos progenitores y de la camada, puede garantizar la pureza de raza. No vale que te enseñen un papel de RRC (Registro de Razas Caninas). Eso solo implica que un juez, con escasos o ningún conocimiento del estándar de la raza, reconoce a un perro como si fuera de una determinada raza. Y sin contemplar ni saber, con toda seguridad, cruces anteriores, que pueden hacer de ése, un perro mestizo. Solo, y solo, un pedigrí emitido por la RSCE (Real Sociedad Canina Española), garantiza la pureza de raza; ahí puede verse un mínimo de tres generaciones hacia atrás, dándonos una idea legal, oficial y real, de dónde viene ese perro. Si alguien te dice que tiene perros de líneas de tal o de cual, maravillosas, pero no tiene pruebas escritas ni pedigrí de la RSCE que lo demuestre con generaciones atrás, con su correspondiente número LOE, desconfía inmediatamente, y olvídalos.

 

5.- Ojo también con el precio. Todo perro de pura raza tiene un  precio mínimo (según estudio de la OCU, de hace algunos años, el precio medio de un cachorro de pura raza con pedigrí son 420 euros; hoy piensa que será al menos de 550 euros...). Si te lo dejan muy barato: para empezar, puede no ser de pura raza; puede ser importado de a saber dónde, puede no cumplir con los requisitos veterinarios mínimos, puede incumplir medidas de higiene, estar enfermo, puede estar alimentado con pienso de muy baja calidad (afectando gravemente a su salud y crecimiento), etc.

 

6.- Exige siempre las máximas garantías, y por escrito (ver, como ejemplo, las garantías que ofrecemos en Torreiro do Mar). Infórmate siempre incluso con exceso de información. Tener un Gran Pirineo auténtico no tiene precio.